Para entender cómo y por qué se aceleran los objetos, hay que definir la fuerza y la masa. Puede medirse en función
de uno de estos dos efectos: una fuerza puede deformar algo, como un
muelle, o acelerar un objeto. El primer efecto puede utilizarse para
calibrar la escala de un muelle, que a su vez puede emplearse para
medir la magnitud de otras fuerzas: cuanto mayor sea la fuerza F, mayor
será el alargamiento del muelle x. En muchos muelles, y dentro de un rango de fuerzas limitado, es proporcional a la fuerza:
F = kx
Donde k es una constante que depende del material y dimensiones del muelle.
PRIMERA LEY DE NEWTON
La primera ley de Newton afirma que la aceleración de un objeto es proporcional a la fuerza neta a que está sometido. Si la fuerza neta es nula, la ley de Newton indica que no puede haber aceleración.
Un libro situado sobre una mesa experimenta una fuerza hacia abajo
debida a la gravedad, y una fuerza hacia arriba ejercida por la mesa
(denominada fuerza normal). Ambas fuerzas se compensan exactamente,
por lo que el libro permanece en reposo.
MOMENTO DE UNA FUERZA
Para que haya equilibrio, las componentes horizontales de las fuerzas que actúan sobre un objeto deben cancelarse mutuamente, y lo mismo debe ocurrir con las componentes verticales. Esta condición es necesaria para el equilibrio, pero no es suficiente. Por ejemplo, si una persona coloca un libro de pie sobre una mesa y lo empuja igual de fuerte con una mano en un sentido y con la otra en el sentido opuesto, el libro permanecerá en reposo si las manos están una frente a otra. (El resultado total es que el libro se comprime). Pero si una mano está cerca de la parte superior del libro y la otra mano cerca de la parte inferior, el libro caerá sobre la mesa. Para que haya equilibrio también
es necesario que la suma de los momentos en torno a cualquier eje sea
cero.
El momento de una fuerza es el producto de dicha fuerza por la distancia perpendicular a un determinado eje de giro. Cuando se aplica una fuerza a una puerta pesada para abrirla, la fuerza se ejerce perpendicularmente a la puerta y a la máxima distancia de las bisagras. Así se logra un momento máximo. Si se empujara la puerta con la misma fuerza en un punto situado a medio camino entre el tirador y las bisagras, la magnitud del momento sería la mitad. Si la fuerza se aplicara de forma paralela a la puerta (es decir, de canto), el momento sería
nulo.
Para que un objeto esté en equilibrio, los momentos dextrógiros (a derechas) en torno a todo eje deben cancelarse con los momentos levógiros
(a izquierdas) en torno a ese eje. Puede demostrarse que si los momentos
se cancelan para un eje determinado, se cancelan para todos los ejes.